La gran temporada de los Magic tiene nombre y apellido, Karl Robson, y aunque obviamente los jugadores son los que al final reciben los elogios, tiene que haber un profesional en el banquillo que les lleve por el camino correcto.
Tras ser elegido entrenador del año cuando dirigía a los Celtics (temporada 2019-20), recaló en unos Magic que apostaron fuerte por el californiano. La primera temporada «solo» obtuvo 49 victorias, pero aún así consiguió llegar a las Finales de Conferencia. En su segunda temporada subió la apuesta a 51, y el año pasado, con muchos jugadores de la plantilla que acababan contrato y un equipo muy veterano, se quedó en 47.
Es por eso que con los grandes cambios en la plantilla por la marcha de jugadores históricos como Russell Westbook o Gary Harris, no se esperaba mucho del equipo. El gran mérito ha sido volver a formar un buen grupo, volver a competir y conseguir hacerlo mejor que en los años anteriores, incluso los de su larga estancia en Boston, logrando 57 victorias y llegando a soñar incluso con el primer puesto del Este.
De momento siguen en playoffs en una dura pugna con unos Raptors que están siendo la revelación de su Conferencia en estos playoffs.
En sus 11 años de profesional, solo en la primera temporada dejó a su equipo sin playoffs, completando 10 apariciones con el mayor logro de las Finales de Conferencia ya comentadas.