DURANT EMPUJA A LOS CAVALIERS A GANAR OTRO ANILLO

Cleveland Cavaliers – Dallas Mavericks (4-3)

Pues los Cavaliers se llevan otro anillo más para su colección (ya van 8) después de un partido resuelto de forma clara en la segunda parte, donde los locales fueron muy superiores a unos Mavericks que no pudieron mantener el alto ritmo anotador local. Para romper la costumbre, esta vez los Cavaliers no salieron dormidos, lo que les permitió anotar tres canastas seguidas y enseñar las uñas a su rival. Los Mavericks se desperezaron poco después y entraron en una bonita batalla anotadora (19-14 a los 5 minutos). Dicha reacción les llevó a acercarse en el marcador, pero la rebelión la pararon los locales con dos triples seguidos y un mate de Durant tras robo del propio jugador (32-22). Los visitantes lo probaban a base de triples, pero los de Cleveland no fallaban casi ningún ataque, con lo que la ventaja se mantenía. Al final de los primeros 12 minutos, dominaban los Cavaliers por 12 puntos (52-40), un parcial asombroso para ser solamente el primer cuarto. Estaba claro que no se podía aguantar ese ritmo anotador, y los fallos empezaron a llegar en el segundo cuarto. No obstante, las diferencias se mantenían en los mismos parámetros, si bien en el ecuador del cuarto, se redujeron a 5 puntos. Los triples, más que un arma estaban siendo una solución y uno de Murphy puso cerco a los Cavaliers (62-60 a menos de 5 minutos del descanso). Algunos minutos después, otro triple, esta vez de Murray, colocaba a los texanos por delante (66-68) lo que llevó al entrenador local a pedir tiempo muerto. De ahí al descanso, intercambio de canastas y empate de camino a los vestuarios (72-72). El tercer cuarto comenzó como el primero, con los locales más activos y tomando ventaja con rapidez. Los Mavericks lo pasaban fatal para anotar, sobre todo por la negación de Simmons en  los tiros libres. de esta forma, mediado el cuarto, los Cavaliers mandaban por 9 (90-81). En estos momentos, supieron lidiar con la ventaja y hacer lo que debían, seguir defendiendo fuerte y buscar canastas fáciles por mediación de James y Durant. Fueron pasando los minutos sin que los visitantes lograsen apretar el marcador, acabando este cuarto con clara ventaja de Cavs (109-95). La desesperación se apoderó de los de Dallas en el inicio del último cuarto, y el partido se volvió cada vez más claro para los locales. A falta de 9 minutos mandaban por 22 y solo una debacle evitaría su 8º anillo. Fue algo que no pasó y lejos de recortar diferencias, lo que ocurrió es que se ampliaron hasta los 29 del final (139-110). Durant fue el mejor del partido (y también de las finales), aunque hubo muchas actuaciones destacadas. James se quedó a una asistencia del triple-doble, mientras Wright, Anderson y Hood estuvieron muy acertados en ataque. Por parte visitante, les faltó un poco a casi todos, siendo Murray el más entonado, sin olvidarnos de un Murphy que tiró del equipo en muchos momentos.